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Consuelo Araiza Dávila
En San Luis Potosí, la Congregación de Escalerillas ha vivido históricamente la invasión de tierras tanto como por falsos ejidatarios, hasta por exgobernadores y conocidos bufetes de abogados que se han prestado a la corrupción. Hoy, en pleno 2010, es notoria también la ambición de poderosos empresarios que también desean un pedazo de tierra, que es como un poderoso pastel, dada la privilegiada ubicación de estos predios, propiedad comunal que según el plano más antiguo, datan del año de 1929 y que hoy se encuentran en litigio.
En entrevista con la presidenta de la Comunidad de Escalerillas, Beatriz Valero Bravo, defendió las 5 mil 815 hectáreas que tanto el Ayuntamiento ha querido vender en algunos terrenos fraccionados como los que se ubican en la presa San José, como la afectación que haría la Secretaria de Comunicaciones y Transportes federal, en caso de hacerse el proyecto del anillo Periférico-poniente, pues afectaría sus tierras.
LOS NOMBRES DEL PODER
La presidenta Comunal electa mostró diversos expedientes del Tribunal Unitario Agrario y del Registro Agrario Nacional donde en los litigios por las tierras comunales mas valiosas de San Luis Potosí, aparecen personajes como Marcelo de los Santos Fraga, ex gobernador, familia como López Palau, Canales Bazán, Gómez Valle, José Mario de la Garza y Joaquín Zendejas Pérez y tros que pretenden ganar los derechos de comuneros.
Una de las primeras disputas se dieron con 542 hectáreas que promovió el Ayuntamiento, el expediente 231/1994 “a donde peleamos contra la inexistente Congregación de San José Buenavista, cuyas personas morales de Duracero SA de C.V., son: Francisco Pérez Morales, Roberto López Palau, Raúl González Vázquez, Carmen Bravo Blanco, Angel Pérez, José Trinidad Arias, María de Lourdes Meléndez, Román Pérez y los hermanos Jesús Emilio y Luis Ernesto Valdez Gómez: “Fue un juicio de amparo 1658/85 doloso donde estas personas recamaban ilegítimamente las 5 mil 815 hectáreas de la resolución presidencial de 1929.
“Fue un asunto grave en el que peleamos fuerte porque en el anexo nueve con fecha del 7 de enero de 1994.la persona moral de San José Buenavista, hizo su Asamblea General Ordinaria de Accionistas, teniendo como comisario a Marcelo de los Santos Fraga, contador público que más tarde sería gobernador del Estado y quien se hizo acompañar por el accionista mayor, el ingeniero Joaquín Zendejas Pérez, presidente del Consejo de administración de San José Buenavista, para ello, se prestaron como representantes legales Héctor Raúl García y José Mario de la Garza Marroquin, abogado de Duracero, S.A. de C.V. y de Construcciones y Estructuras de Concreto y cuyos clientes se adueñaron del predio de la Presa de San José, de 169 hectáreas, fue todo un litigio ya que José Canales Bazán, dueño y socio de Duracero, S.A. de .C.V siempre estuvo inmiscuido en la adquisicion del 50 % nuestras tierras de la presa San José, bajo el cobijo de esa sociedad San José Buenavista que no existe.
Zendejas Pérez fue allegado constructor de Marcelo de los Santos Fraga y a quien éste le otorgó la mayoría de las licitaciones de medio centenar de puentes de la capital potosina, cada uno con una inversión arriba de los 60 millones de pesos.
TIERRAS DE GLORIA
Tanto la presa San José como los terrenos del mal llamado Club Halcones fueron la manzana de la discordia, tierras privilegiadas que rodean San Miguelito, Rinconada de los Andes, el Ejido Capulines hasta la Teneria y Villa Magna, entre los capitalistas que siempre han añorado arrebatarles las tierras a la Congregación.
Históricamente hablando éstas provienen de 1867 cuando Sebastián Bravo, entonces dueño de la hacienda de San Francisco, del municipio de Villa de Arriaga, se dio el primer pleito por la construcción de un potrero que atravesaba diversas mojoneras.
Luego, en 1924 a doña María de la Luz Hernández de Soberón se le hizo saber que la Comisión Agraria estaba tramitando una solicitud de restitución de tierras que presento la comunidad de escalerillas. En ese tiempo eran 566 habitantes contra los 47 de Buenavista, 35 de El Ahogado, 38 de La Maroma, 81 de los conejos, un total de 767 personas que componían el censo de población. Por fin el 18 de diciembre de 1985, se e concedió un amparo a Jesús Aguilar Bravo, primer comisariado ejidal en el juicio de amparo número 1658-85, donde resolvió el primer secretario del juzgado segundo de distrito en el estado, en la foja e se lee al calce que “la posesión definitiva se a hubiese dado al poblado beneficiado con anterioridad a la diligencia de apeo y deslinde…por lo que al no ejecutarse en sus términos la resolución presidencial se violan en perjuicio del núcleo ejidal “escalerillas”, del municipio de esta capital”, dice el documento.
Y es que la ahora presidenta de los comuneros acusó que falsos ejidatarios de San José habrían sido inducidos por los capitalistas de Duracero, S.A. de C.V. para conformarse como núcleo ejidal con engaños y promesas de despojar a la Congregación con terrenos y disputas.
Otro lío legal fue cuando la propietaria Alejandrina Pérez Morales murió sin dejar testamento y su hermano Francisco fue inducido por Canales Bazán y empadronaron 866 hectáreas en el juicio sucesorio intestamentario en junio de 1991, en el expediente 665/991. Francisco Pérez exigió predios del oriente de la Presa San José inducido por Canales Bazán.
DUEÑO DE CARRANCO TRAS TERRENO
“Otro ambicioso tras Escalerillas fue Javier Gómez Valle, propietario de las tierras de Carranco, quien representado por el abogado José Mario de la Garza Marroquín, le compró los derechos litigiosos a los hijos de Alejandrina Morales. Gómez Valle “roda cabezas” entre ellas a Canales Bazán, al ex gobernador Marcelo de los Santos y detalló las formas ilícitas en que éstos ganaron tierras.
Hoy, la Congregación ve el enorme crecimiento demográfico y exige el pagó justo por terrenos que le pertenecen, pues San Luis Potosí tiene necesidad de crear vivienda y extender su economía, pero todo ello con el reconocimiento de los verdaderos dueños de la tierra.
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